GRAN VICTORIA ARGENTINA
En lo que fue su mejor presentación en lo que va de la preparación, venció al Brasil de Magnano por 77-73. El tridente Prigioni-Delfino-Scola tuvo una muy buena tarea.
Pese a las ausencias y a jugar con Jasen y Quinteros disminuidos físicamente, Argentina dominó de principio a fin al Brasil de Magnano, mediante una gran tarea defensiva y un ataque basado en la criteriosa conducción de Pablo Prigioni.
En el comienzo, Delfino con dos triples consecutivos le dio la primer ventaja a nuestro representativo (10-5).
Brasil sólo mostraba a sus aleros Leandrinho y Alex, como armas ofensivas certeras.
El primero anotando en contragolpe y penetrando la defensa blanquiceleste, para anotar o descargar y el segundo anotando detrás de la lína de 6,25.
Curiosamente a lo largo de todo el juego, ninguno de los dos equipos lastimó a su rival desde el poste bajo.
En el caso de Brasil, producto quizás de las ausencias de Nene y Tiago Splitter.
Por el lado de Argentina, una defensa de atrape por la línea final a Luis Scola, no le permitió jugar con claridad desde esa posición.
Prigioni se las ingenió para generar juego mediante los pick al balón que recibía. El base anotó de larga distancia y además generó opciones claras de tiro, tanto para Delfino como para Gutiérrez o Quinteros. Los dos primeros supieron aprovechar el trabajo del cordobés, pero el escolta entrerriano no estuvo fino para sus lanzamientos, producto de su angina.
El único bache claro durante el encuentro fue en la salida del base argentino durante el segundo cuarto. Pero esto coincidió con el descanso de Huertas y la reacción rival se aplacó.
Raúl y Nezinho, pese a no tener malas actuaciones nunca lograron conducir al equipo hacia las opciones más certeras.
Anderson Varejao mediante buenas acciones individuales logró emparejar el tramo en el segundo cuarto, pero dos triples consecutivos de Prigioni en su regreso al juego, le dieron diez de ventaja al cerrar la primer mitad (35-25).
Además de los mencionados, hubo un gran trabajo de Kamerichs en esta parte del encuentro, tomando rebotes, defendiendo y anotando cuando la situación se lo presentaba.
Argentina sólo fue lastimada en defensa por lanzamientos exteriores de su rival. Ese fue el planteo y suponemos que se repetirá durante el mundial.
Le dio gran resultado, ya que dejó a Brasil en 25 puntos durante la primer mitad.
En el inicio de la segunda parte, un Brasil intenso logró achicar a 4 primero (35-31) y luego pasar al frente por la mínima (46-47).
Marcelinho con 3/5 en triples fue el arma ofensiva más importante durante este período.
Pero entre Delfino, Prigioni y Scola se las ingeniaron para generar opciones claras de gol e inclinar el encuentro hacia su conjunto.
Delfino jugó en un nivel superlativo, producto también de las buenas cortinas que colocaron los internos blanquicelestes y de los pases en tiempo del base argentino.
En la segunda mitad del último período, el "lancha" lastimó desde todas las posiciones a los verdeamarelhos y le dio la ventaja necesaria a su equipo para cerrar el juego con tranquilidad.
Fue 77-73 para Argentina, con un gran trabajo en ambos lados del campo. En defensa cerrando los caminos hacia el canasto a su rival y en ataque buscando siempre la mejor opción y sin tener a Scola como jugador determinante.
Los buenos porcentajes de triples que lanzaron Prigioni, Delfino y Gutiérrez suplieron la buena defensa brasileña sobre Luis.
Brasil será otro equipo muy diferente cuando tenga a Nene y a Splitter. Argentina en el encuentro de hoy, lo dominó durante gran parte del juego en el rebote y este dominio no debería ser tan claro en un encuentro futuro.
Ambos equipos mostraron falencias a la hora de jugar con sus bases alternativos y deberán mejorar en ese aspecto, ya que el mundial es largo e intenso y la rotación termina siendo clave.
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